Cuando se produce una avería, una reparación o un accidente nuestro coche se convierte en un quebradero de cabeza para nuestras carteras por tener que desembolsar un dinero con el que no contábamos. Sin embargo, hay pequeñas operaciones y fallos que no son tan caros como parecen y es que siempre tenemos una alternativa para no arruinarnos. Por ejemplo, en el caso de una avería del filtro de partículas no tenemos que cambiarlo por uno nuevo ya que es posible que no sepas que podemos limpiarlo, regenerarlo y quedar como nuevo.
Filtro de particulas diesel: precio
Si tenemos en cuenta que el filtro de partículas es una dispositivo situado en la zona del escape y que tiene como función limpiar las partículas sólidas que genere nuestro coche diésel, lo normal es que si vas conduciendo y tienes una avería filtro de partículas, lo lleves a un taller para te den el precio de uno nuevo.
El problema de esto es que en ocasiones, el precio de una unidad es mucho más cara que otro tipo de filtros como el del aceite. Un filtro de partículas puede costar bastante dinero, de hecho, los originales los puedes encontrar con precios que oscilan los 800 euros y superar los 1.000 euros.
Sin duda, el precio de un filtro de partículas diésel dependerá del modelo, la marca, si es de recambio, completo o no. Pero lo cierto es que hay una alternativa a pagar este precio, incluso si es de recambio. Una opción muy interesante es la limpieza profesional de este producto mediante ultrasonidos.
Efectividad de limpieza casi total
Lo bueno es que su efectividad es de entre el 85 y el 95 % que hace que quede como nuevo tu filtro de partículas. También puede suceder que compres uno de repuesto en buen estado en un desguace y sirva.
Pero para ello hay que hacer un diagnóstico y análisis del coche y estudiar el estado del filtro de partículas. En Fast Repro somos especialistas en contarte las cosas que otros talleres no se atreven.
Y es que la limpieza del filtro de partículas es sencilla, verificamos su estado y sensores. Después lo desmontamos del vehículo y abrimos el FAP para verificar si está quemado o fundido. Una vez analizado es hora de sumergirlo y limpiarlo con ultrasonidos durante varias horas para eliminar todos los restos de partículas y que quede como nuevo.
Una vez limpiado y transcurrido el tiempo se verifica que está limpio y si es el caso se vuelve a limpiar una segunda vez para que no de fallo en los sensores ni en su instalación de nuevo en el coche.
Al acabar se cierra el filtro FAP y se procede a su montaje en el lugar original. Después se conecta el coche con el ordenador de diagnóstico y se comprueba el funcionamiento del mismo y sus sensores. En el caso de fallos en la centralita se verifica y soluciona.
Se elimina el fallo del cuadro de mandos y el coche volvería a tener las prestaciones de antes con un motor a plena potencia.
Y eso es todo. Todo depende de cómo tengas tu filtro. Eso sí, que sepas que puedes limpiarlo y es más barato.